miércoles, abril 01, 2009

¿Insumisión o vasallaje ante la RAE?

El tema es polémico. Hay en Latinoamérica escritores que piensan que escriben un castellano distinto al de España. Lengua castellana que lleva en algunos casos dentro el virus de la sintaxis de una lengua indígena. Como pasa con la sintaxis quechua insertada en la obra del escritor José María Arguedas. García Márquez ha pedido que se jubile la ortografía, que desaparezca la letra hache, los acentos, etc. Esto es porque se acentúa y se norma la "corrección" de las palabras por el canon y no por la utilización del lenguaje popular del país u región de los autores que deseen representarla. No todos los escritores de América piensan igual. Es obvio que así sea por los rezagos del pensamiento colonial en sus cabezas. Como tampoco comparten este opinión un sector de los escritores de España. Los cuales acatan sumisamente como vasallos las reglas de la RAE.

Los defensores del idioma español se basan en una normativa filológica miope. Por eso es importante dar una visión más amplia del problema. Para ellos nos serviremos del segundo Wittgenstein. Ludwig Wittgenstein es la máxima autoridad en filosofía del lenguaje. La mirada de su texto investigaciones filosóficas es iluminadora. El nos plantea en ese texto una visión del lenguaje alejada de la academia y sus diccionarios. Su opinión es que el significado y sentido de las palabras se dan por el contexto cultural y no por normas gramaticales . Osea por el uso de los interlocutores de la lengua hablada. No por la lengua escrita o las reglas de la ortografía. No se puede reglamentar la lengua castellana desde una oficina de la RAE en Madrid. La lengua esta en la calles. La lengua esta en los pueblos. La lengua esta viva en las regiones de América y España de una forma creadora. A esta visión más allá de una normativa filológica de la lengua Wittgenstein denomino juegos del "lenguaje".

¿Porque el habla popular de un cuzqueño, un chilango, un andaluz, un chicano, un gallego no se utiliza en su lenguaje literario? ¿Sera porque contraviene el orden de autoridad del “español”? ¿Se quiere creer en esa farsa de la homogeneidad del idioma de Castilla?

Algo parecido pasa con el Spanglish. Osea el lenguaje híbrido entre el castellano e ingles en el cual se comunican millones de latinoamericanos en Estados Unidos. No es una aberración idiomática. Es verdad no es una lengua.Pero es una forma de lenguaje tan válida como cualquier otra.

Termino este post citando estas palabras de Gabo:

«El deber de los escritores no es conservar el lenguaje sino abrirle camino en la historia. Los gramáticos revientan de ira con nuestros desatinos pero los del siglo siguiente los recogen como genialidades de la lengua. De modo que tranquilos todos: no hay pleito. Nos vemos en el tercer milenio».

7 comentarios:

Gabriel Otero dijo...

Leo:

Te solicito autorización para publicar este texto en mi blog, me agrada tu postura.

Un abrazo
GO

Leo Zelada dijo...

Gabriel,

Publicalo en tu blog. No hay problema. Me alegra que te haya gustado mi posición sobre la RAE.

Un abrazo.

Geni (Maria Eugenia) dijo...

Me ha parecido muy interesante.
Un besito,te visitare.
Voy a hacerme seguidora tuya.
Un besito.

Leo Zelada dijo...

Geni, pues es un gusto linda.

Un beso hasta Cadiz.

Leteo dijo...

Tratándose de literatura, ¿por qué no va a poderse aplicar la lengua como a cada uno plazca? La literatura ha de basarse en la libertad, si no ¿qué nos queda?
No sería capaz de especificar pero estoy casi seguro de haber leído (mínimo) un autor que aplica esto.
Juan Ramón Jiménez usaba la 'j' cuando le daba la gana...

Un saludo.

Leo Zelada dijo...

Así es Leteo. Sin la libertad creativa no podría existir la literatura.
El uso caprichoso de la j en Jiménez es un buen dato.
Un saludo.

silvia dijo...

Ni insumisión ni vasallaje, todo empleo de la lengua es un reciclaje personal. Toma en cuenta que el lenguaje no es un ente estático, por el contrario es un ente vivo, no hay lenguaje sin habla, ni norma que no esté hecha para romperla.La literatura no sólo es correción, básicamente es creación. Pero no estoy de acuerdo con los criterios de vasallaje y rezagos de pensamiento colonial.