Las vacaciones de agosto en España son algo casi religioso, como la navidad. Madrid en este mes queda desierta, porque sus pobladores viajan por diferentes partes del mundo. Yo tenía muchas fantasías sobre estas vacaciones. Irme a Lisboa, Praga e Ítaca, empero, antes pasar por las playas de Cádiz e Ibiza, las joyas del mediterráneo. Mas al final he sucumbido ante mi actual obsesión literaria. Quedarme en Madrid y acabar de una vez por todas con mi novela. Y tal vez hacer un viaje corto a Córdova, a dar con los últimos toques a mis investigaciones sobre el Inka Garcilaso de la Vega y el poeta árabe andalusí Ibn Zaydun. Así que me tendrán estos meses en mi blog. A contracorriente de la mayoría de Bloggers de la península. No obstante, si pasan de casualidad por esta bella ciudad, tenga en cuenta que tendrán a un Virgilio con el cual compartir su amor por las letras. Mis queridos y leales lectores.
La verdad es que los auténticos poetas no tenemos vacaciones :)
Comentarios
Disfruta de la tranquilidad "relativa" de estos meses en Madrid. Gracias por tu visita.
Sera un placer que me leas.
Un gusto.
Besos
Saludos.