jueves, mayo 29, 2008

La Cena de orfandad por Víktor Gómez


Hace una semana me entere que el poeta madrileño Víktor Gómez, residente en Valencia, realizo un pequeño pero interesante comentario sobre mi poema La última Cena, en el destacado blog literario : http://caudaldepoeticas.blogspot.com/


El cual paso a compartir con ustedes:


“ El poeta peruano residente en Madrid, Leo Zelada, nos deja un poema que interpela sobre la verdadera mirada al mundo, al presente, al otro. Y consigue entrecruzar con gran emoción y contenida expresividad poética esa dialógica poco común entre la esencia del cristianismo y la radicalidad, entre el cómo se vive y qué se cree, entre la palabra desgastada por los excesos y el poema certero, revelador.¿quién es mi prójimo? ¿de qué quiere dar cuenta mi palabra?Mejor leer ya el poema. No necesita sino atención y relectura. Y coraje”.


Víktor Gómez




La última Cena


Parado en una barra

me paso la tarde

esperando llegue

mi ración de pan y queso


La tristeza brilla en los 12 hombres y mujeres

que habitan este restaurant


El bullicio esconde

una pena inmensa


Aquí ya es tarde en Madrid


Solitario entre las gentes

inicio el rito cotidiano de mi cena.

12 comentarios:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Leo:

Agradezco tu empático y amistoso enlace. Compartir y dialogar desde la poesía, desde lo intuitivo y deliberativo de un estar en el mundo abierto a la intemperie, abierto a lo inextricable y también a los orígenes de la convivencia y de las desaveniencias, ser para congeniar, hacer para restituir la "historia del daño" que diría Antonio Méndez Rubio, todo lo que nos une involuntariamente y nada de lo que nos separe... ese tomar partido por las cosas que propusiera Francis Ponge incluye reconocer y sumarse a los que en el quehacer poético se dejan la piel, a riesgo de vulnerabilidad, en lealtad con su conciencia y en resistencia contra esa persistente y malevola incitación actual a no pensar, no cuestionar, no pregunatarse.

Un abrazo grande,

Tu Viktor

almena dijo...

No recordaba haberte leído este poema, Leo. Pero, ciertamente, en Madrid a veces la íntima soledad se siente hambrienta... y sabe que no llegará en la cena el alimento que anhela.

Un abrazo!

Luis Vea dijo...

No sé si sabes que ha muerto tu compatriota y poeta Alejandro Romualdo Valle.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Una voz poética muy humilde, nada que abunde en este tiempo. Un saludo, Leo, estamos en contacto.

Antonia

Leo Zelada dijo...

Viktor,

Me alegra saber que hay poetas que tienen una interesante reflexion sobre la vocación de la palabra como tu.

Un abrazo.

Leo Zelada dijo...

Almena,

Este es un poema reciente que habla sobre una realidad de las grandes ciudades unida a una iconografía religiosa.

Saludos.

Leo Zelada dijo...

Luis,

Si, me acabo de enterar hoy, es una perdida lamentable para las letras en lengua castellana.

Saludos.

Leo Zelada dijo...

Gracias por tu comentario Antonia.

Un abrazo.

Luis Vea dijo...

Aunque sé que te va a ser difícil acudir te hago llegar igualmente una invitación:
El próximo 4 de junio a las 19,30 horas en el Centro Cultural Can Fabra, c/Segre 24-32 (Sant Andreu, Barcelona) tendré el honor de presentar en sociedad el libro Cotidianos, un libro de relatos. Para ello contaré con la ayuda del escritor Jorge Larena, autor de la exitosa novela Sombras de otoño.

Un saludo.

Luis

Anónimo dijo...

quihubo Leo, aca nomas pasando a ver que ocurre y visitando.

sabado de noche con sopa, pan, vino y relecturas y ediciones episcopales-religiosas...ultimas cenas para el renacimiento ese que trae cada maniana y despertar...

maniana me hecho una vuelta al bukowski a ver que dice la gente que recita prosa y a ver si me hecho un performance tambien...

saludos y que siga la poesia.


www.ciudadsomnolienta.blogspot.com

Leo Zelada dijo...

Ciudadsomnolienta,

Espero que la pases bien y que leas tus textos alli. Ya nos veremos la semana que viene.

Saludos

Leo Zelada dijo...

Luis,

Espero sea un exito tu presentación. En este momento me encuentro de viaje por varias ciudades de Extremadura. Lo que sucede es que ahora salgo poco de Madrid, salvo cuando tengo una invitación de lectura. Ando muy liado, me esta yendo bien en esta bella ciudad de Madrid y ando recargadisimo de trabajo. Pero me alegra que tu labor literario vaya creciendo.

Un abrazo.