lunes, mayo 28, 2007

Llovía en la feria del libro de Madrid

Este año se cumplió el pronóstico de que en la inauguración de la feria del libro de Madrid caería la lluvia. Había tanto dolor en los árboles del Retiro, que no lo pude soportar, y lo transforme en trémula sonrisa en el lago.

Hoy he venido a la feria con el poeta peruano Rolando Vera, a quien iría a buscar a su casa para ver que había sucedido con el, ya que su familia lo había dado por desaparecido y muchos de nosotros por muerto, grande fue mi sorpresa al encontrarlo en su piso pintando de lo mas relajado y tranquilo. Le he explicado el rumor que había ido creciendo conforme pasaba las horas sobre su posible deceso. Me he reído aliviado de que esto no fuera así y le he invitado a recorrer la feria del libro de Madrid. Allí nos hemos encontrado firmando libros al escritor Ramiro Calle, guru de la literatura mística en España y quien al ver a Rolando se mostrara muy contento diciéndo que el ha escrito la novela de amor mas bella que ha leído. Rolando Vera sonríe agradecido por tales palabras y yo me siento contento de ver que reconocen el talento al más antiguo poeta latinoamericano que reside en la península.

Me ha sorprendido ver en la feria el nivel original del marketing de las editoriales. Por ejemplo se ven varios jóvenes con camisetas blancas y logotipos verdes anunciando la venta de la novela Cien años de soledad de García Márquez, van leyéndola alternadamente mientras van caminando por toda la feria. Las cosas que se ven me dice risueño Rolando. Nos hemos sentado en una terraza a tomar unas coca colas y mientras Rolando me iba contando una anécdota muy sugerente cuando conoció a Rafael Alberti, se nos acerca una joven pintada el rostro de blanco,las cejas y los labios de negro quien nos anima haciendo mímica a tomar una abanico donde anuncian la reciente salida de la novela llamada “Espanto”. Rolando le ha dicho que le causa "espanto" leer sobre estos temas, mas aun cuando se acaba de enterar que lo daban por fallecido… y sonreimos.

Me he acercado a hablar con el escritor Álvaro Pombo y me ha aclarado que el no cree que un poeta necesariamente sea incapaz de escribir orgánica y correctamente una novela, este tema es a propósito de un comentario que hizo públicamente Pombo cuando presento al penúltimo premio Nadal de novela. Me ha animado incluso Pombo a leer su poca conocida faceta de poeta. En ello se me acerca Rolando diciéndome que se siente mal y estaba a punto de caerse, y que por favor fuéramos a la Cruz Roja. Entonces preocupado le aviso el estado de salud de mi amigo a una policía, y ella como si se tratara de una gran personalidad, ha iniciado todo un operativo de emergencia que ha movilizado a guardias de seguridad, doctores, libreros logrando que una ambulancia ingrese surrealistamente a la feria y en medio de los stand de libros atender a mi amigo de emergencia. Pasado el susto y percatarse los médicos luego de meticulosas revisiones que solo se trataba de un malestar producido por un problema con la cervical que le produce mareos y desmayo por falta de irrigación sanguínea, es que le digo a Rolando que no se puede quejar, que lo han tratado tan bien como si hubieran atendido al mismo rey de España.

Nos hemos encontrado con Loyds, un amigo poeta argentino y casi al finalizar la feria nos hemos encontrado con el escritor Benjamín Prado, el cual muy simpático y afable nos ha contado que es hincha del Real Madrid, que le gusta el fútbol y que incluso tiene una camiseta autobiografiado por Maradona. Me agrada ver que hablamos de fútbol y no de aburridos temas esnobistas literarios. Además me dio la buena noticia de la victoria del Real Madrid, este año campeonatos e iremos a festejarlo, si San Isidro lo quiere, a la plaza Cibeles. Exabrupto futbolero aparte, Benjamín nos cae bien por que nos parece un tipo encantador y sencillo. Otra de las personas agradables que hemos conocido es a Francisco Garamona poeta y editor del sello Mansalva quien tiene un stand en la feria, donde se difunde lo más interesante de la literatura argentina y quien quijotescamente tiene una librería en Buenos Aires que solo vende libros de poesía.Francisco nos parece súper buena onda. Me dice que soy el Bolaño de aquí y yo espero de corazón no padecer tanto como el autor chileno y esperar mi consagración como escritor los últimos años de mi vida.

Cerrada la feria y ya la noche cayendo sobre Madrid, con Rolando y Loyds nos dirigimos al metro rumbo a nuestras casas. Al llegar, me he tomado un último Nestea con Rolando y con el poeta cubano Alberto Lauro quien ha caído sorpresivamente al Domingo. Hemos hablado de nuestras vivencias como escritores latinos en España y de nuestros sueños y proyectos literarios mientras la luna va cayendo maternal sobre nuestros rostros.

Puede llover sobre Madrid y el cielo ponerse nublado por momentos, pero nos basta estar reunidos tomando un café, para saber que la poesía nos cobija a pesar de todo.

3 comentarios:

Loyds dijo...

ojalá todos esos sueños y proyectos empiecen a concretarse
un placer leo la tarde del otro día caminando x la feria
un abrazo amigo

Leo Zelada dijo...

Asi es Loyd,

Hay que sacar adelante nuestros sueños. Mañana viernes los escuchare en Amardord.

Un abrazo

Juan dijo...

Qué llueva lo que quiera. Inyectemonos por sangre todo lo que ofrece TODO LO QUE OFRECE, esta primavera.

No me importa si suena becqueriano, hoy no me importa, lo digo y lo repito, primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,primavera,